sábado, 25 de junio de 2016

Erosión cultural

La sublimación es un cambio de estado del agua donde ésta pasa del sólido al gaseoso sin pasar antes por su intermedio líquido.
Hace más de cinco siglos los incas advirtieron que realizar este proceso en algunos alimentos les otorgaba características de conservación y podían preservarlos a lo largo del año hasta alcanzar la próxima cosecha.
El “chunio” es una harina de papa que ellos lograron elaborar a partir de este fenómeno científico.
Congelaban durante la noche la papa a alturas del orden de los 4000 metros sobre el nivel del mar, donde la presión atmosférica es baja, y a la salida del sol la molían, entonces el hielo simplemente se evaporaba.
Al mojar el chunio los Incas obtenían nuevamente papa.
Hoy se conoce el proceso como “liofilizado” y permite, entre otros productos, hacer que las frutas finas, como la frambuesa o la frutilla, adquieran el aspecto del “telgopor” pero sin perder sus cualidades, de modo que una vez hidratado recuperen las características naturales, todo independizado de la cadena de frío.
A poco más de 500 años del exterminio del mal llamado “Imperio” incaico en manos de Francisco Pizarro, la Argentina cuenta solo con una planta de liofilizado a nivel industrial y se encuentra en la provincia del Chubut.
De esto hablan los que refieren a la Erosión Cultural.

viernes, 3 de junio de 2016

Drogas éticas


Estados Unidos tiene en la actualidad unos 320.000.000 de habitantes, esto da comparado con la población mundial actual, un no menospreciable 5% de susodichos.
Ahora, si contemplamos que ese 5% es el que consume el 75% de las drogas prescriptas, legales o "éticas" del planeta, entonces el razonamiento produce escalofríos.
El “sueño americano” necesita camuflar las tristezas y frustraciones como si no fueran parte de la vida. Toda angustia debe ser ahuyentada por un derroche infernal para que, a los ojos del tío Sam, pueda verse bien y ser aprobado.
Es entonces cuando la perspicacia de las compañías farmacéuticas entra en juego y aporta el guiño químico para hacer que el juego sea más fácil.
El pueblo norteamericano es tan adicto a las drogas como las farmacéuticas al dinero, lo que constituye un lindo y morboso ejemplo de pseudo comensalismo.
La estrategia es bastante sencilla: se lanza una droga al mercado y se le atribuye la cura para una veintena de síntomas que difícilmente no pueda padecer un ser humano en algún momento del día, por ejemplo: abrir la heladera todo el tiempo, mover demasiado el pié, mirar repetidamente el reloj, etc.
Entre las más consumidas se encuentran analgésicos pertenecientes al grupo de los “opiáceos”, tales como “Hidrocodona”, “Oxicodona”, “Metadona”, “Tromadol”, etc. Todas extraídas de la “leche” de la amapola al igual que su prima mala, proscripta y prohibida: la Heroína.
Cada 19 minutos en los Estados Unidos muere una persona debido al abuso de estas drogas “éticas” recetadas indiscriminadamente por sus médicos de cabecera, pudiendo en algunos casos tomar los pacientes hasta 90 píldoras diarias, que incluyen además, aspirinas, Viagra, energizantes, etc.
No hay droga de las llamadas “ilegales” capaz de alcanzar dicho poder mortuorio. Ni los accidentes de tránsito que son muchos y múltiples.
Yo si fuera una corporación farmacéutica estaría más que preocupado, ya que por una cifra diez veces menor, en Pearl Harbor, el líder de los aliados pulverizó a 150.000 japoneses de un plumazo.
No podemos finalizar el texto sin recordar que Estados Unidos es el país que más ha gastado en tener “a raya”, logrado esto o no, al narcotráfico, ya sea dentro de su país, en sus límites fronterizos o hasta en lejanos países con opulentos subsuelos minerales.
Esta es la “libertad” que como paradigma lleva a cabo el país del norte en todos los aspectos de sus diversas políticas.
Han redefinido su significación de un modo que no hay manera, al menos en mí, de escuchar esa palabra sin imaginar algo oscuro detrás de su pronunciación.

domingo, 22 de mayo de 2016

Huella hídrica

La huella hídrica es un indicador que los científicos utilizan para conocer la cantidad de agua que interviene en la elaboración de las diferentes producciones de la actividad humana.
El agua contabilizada para elaborar dicho índice es la que directa e indirectamente participa en el proceso, entonces tenemos agua utilizada en la producción primaria (agricultura, ganadería, procesos biológicos) y el agua concerniente al proceso en sí, industrial o no, como por ejemplo limpieza, refrigeración, energía, esterilización, contaminaciones, etc.
De este modo han puesto a nuestra disposición los valores que alcanzan los valores de las diferentes “huellas” correspondientes a los más diversos productos de uso cotidiano.
Producir un litro de Coca Cola demanda unos 350 litros de agua, un kilo de manzanas unos 850, un Smartphone 1.000, un jean 11.000 y un kilo de Big Mac unos 16.000 litros.
En Argentina el consumo promedio de agua por habitante y por año es similar al promedio mundial, unos 1600 metros cúbicos anuales, en EEUU cada habitante demanda 3000.
El uso de contenedores retornables o reutilizables reduce drásticamente los valores de la huella, al igual que comprar alimentos desprovistos de envoltorios o reducidos en ellos.
Pensar en combustibles producidos a partir de cultivos vegetales es un sabotaje a la naturaleza y un insulto de mal gusto que nunca logrará ser más que el pingüe negocio de quienes patrocinen fraudes de este tipo.
En este mundo prolífico y derrochón, la problemática del agua es muchísimo más seria y compleja que lo poco y nada que nos lo hacen saber.
Quizás sea porque llegado el momento, y como sucede con otras hídricas cuestiones, los primeros que se mojen las patas serán los que viven y sobreviven en los estratos más bajitos de la pirámide antropófaga.

lunes, 11 de abril de 2016

Escorbuto


Como la certidumbre misma de la muerte
como la verdidumbre estoica de la fotosíntesis
como las dudas que acaban con mi mayoría absoluta
como las hipocresías que esconden mis putas
a las botellas rotas y las promesas añicas
a los pibes muertos de ansias intactas
entuertos lubricados, albricias de feriado
escorbutos mañaneros , hediondeces hediondantes

delaciones lubricadas
incestos remilgados
estupros de salón.

jueves, 7 de abril de 2016

Miseria

Solo existe una cosa peor a que me carcoma una duda
Es ser carcomido por la seguridad
La inmunda seguridad de no aprender
De sumar los años con el solo resultado de añadir kilos y arrugas
De perder la posibilidad que la experiencia sea nuestro tesoro una vez oxidado el cuerpo
La sabiduría es una cuña recostada con la punta hacia adelante
Los años nos confunden, nos colman de egocentrismo, nos adjudican una jerarquía que nos ocupa refregando a los que vienen detrás
Es una conducta suicida que la evolución nos cobra a modo de interés
No tengo hilo para este laberinto
Me acurruco redondito a la miseria que vendrá.

lunes, 14 de marzo de 2016

Oscuridad

Los ácidos estomacales pronto tendrán la situación resuelta.
Solo resta ver la suerte que la ingesta tenga en su paso por los intestinos, pero debido a que ha sido mayoritariamente proteica imagino un resultado libre de fermentaciones indeseables.
Afuera las hojas del sauce suenan por acción del viento como cuchillos afilándose mutuamente en un claro ejemplo de simbiosis.
La dotación de cerveza en el gabinete que la mantiene fría acaba de descender drásticamente el domo que censaba su cantidad.
El reloj martilla sus segundos en mi cabeza.
Las actividades pendientes corroen mi supuesta tranquilidad.
La inminente muerte del sol en términos siderales comienza a afectarme.
De un modo centrípeto la oscuridad acaba con mi mirada periférica y avanza hacia el iris.
Es el punto en que todo huele a descomposición.
Estoy en sintonía con el más devastador de los pesimismos.
Con un beso en la pierna a mi chiquito me dispongo a ir a dormir.
No sin antes decirle que todo va a estar bien.

martes, 8 de marzo de 2016

Opciones

Vulnerando derechos de admisión y ajenas al campo de nuestra percepción, las opciones se interponen en nuestra vida de un modo infranqueable.
Ellas son la unidad estructural del destino y nuestras vidas son el resultado de la innumerable sumatoria de nuestras elecciones.
Todo está afectado de opciones, nada escapa a sus intervenciones. Uno puede elegir para su vida las más variadas opciones, desde lavar sus dientes en el Ganges, pasando por adorar al dinero y sus cuestionados modos de reproducirlo, hasta pasar la vida arrojando descendencia en los agrandes conductos de la obra pública.
Y hablando de espermatozoides, quien escribe y quien me lea, no habremos sido más que la opción ganadora en aquella maratón inicial de la vida.
Los "pros" y las "contras", establecidos como masculinos los primeros y féminas las segundas en este glosario machista, describen de un modo publicitario la opción que más nos conviene adoptar.
Cada palabra volcada en este texto ha sido sometida a la probable conveniencia de habérsela utilizado. Incluso el texto mismo es una opción ante tan variado universo textual. Uno puede leerlo después de haber tomado la opción de querer hacerlo, aunque claro está, también puede tomar la opción de interrumpir su lectura por motivos que, opcionalmente, me atraigan o simplemente escapen a mi interés.
Todo es opcionable mientras dure el viaje, absolutamente todo. Solo hace falta pensar en un elemento para encontrarle su opción.

Y mientras termino con el texto pienso en como continuar, que elecciones hacer para parecerme a la persona que alguna vez hube querido ser.
Seguiré buscando cada día para dar con la mejor versión de mi mismo.