lunes, 23 de abril de 2012

Te pido perdón

Por los desperdicios generados en noches de factible pasión.
Por los arrumacos matutinos diferidos propios de un egoísmo nocturno.
Por la cera en las orejas y la baba inflamable que sucede a cada noche.
Por los efluvios retroactivos que poco tienen que ver con vos.
Por el miedo de un futuro que se basa en el pasado y lo paga este presente.
Por el silencio pedante y orgulloso que otra vez se adueña de mis emociones.
Por el mudoclaroscuro que mis iras te regalan mas que esporádicamente.
Por el tiempo que perdés cada día de reproches absolutamente fundados.
Por el tiempo que ganás cada vez que me mandás un poquito a la mierda.
Por no saber expresar en formas lo que este carcamán siente.
Por no tener la astucia de que poco a poco, medio a medio, mucho a mucho, posiblemente te iré perdiendo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario